Alguien con cierto criterio de lo que está pasando en la política española se creía que este acuerdo PSOE-C’s a la sevillana (no lo digo por Susana Díaz, si no por Felipe González) tenía como objetivo llegar al gobierno?.
Tras el no correspondiente. Al menos que se nos diga aquello de que creemos en Caperucita y los siete enanitos.
Todo está hecho en clave electoral con el fin de darle la vuelta a unas encuestas que vaticinaban para el 26J una pérdida moderada de PSOE en favor de Podemos y que los relegaría a la tercera fuerza.
Con esta imagen de “responsabilidad” C’s asumía el papel de abanderado del lobby económico de este país en detrimento de un PP a la deriva lastrado definitivamente por la corrupción. Mientras Aznar y las Faes con Rouco de ideólogo está al acecho para quedarse con los restos de la derecha más conservadora. Con sus posibles cuatro millones de votos. Esa derecha pretende decidir el gobierno de España después del 26J. La otra parte del actual centro derecha se aglutinará en los restos liberales de la parte limpia del pp y un C’s homologado por el ibex35.
Y a partir de ahí no hay Rajoy que impida la gran coalición que quiere Bruselas y que en nada deberá parecerse a la moderada Grecia de tsipras.
Otra posibilidad es que ante este panorama el día 5 de marzo y previo trabajo de “convencimiento” sincero del actual PP, pasado por el tamiz del lobby económico una buena parte o todo el PP se abstenga para que no haga falta llegar al 26J.
La izquierda tendrá que esperar una nueva oportunidad. Quizás cuando Europa supere esta segunda recesión…como decía aquel semanario satírico del tardofranquismo, Hermano Lobo. Para cuándo? “Uuuuhhhh”