LA PROVENZA CHIC

Todos pueden pensar que toda la Provenza es chic (eso que se entiende por lugar donde descansa la creme de la creme). Puede hasta ser cierto. Aquí se refugió Carolina de Mónaco cuando se quedó viuda. Pero si hay un lugar que destaca por su esencia en ese sentido es Saint Remy, galerías de arte, tiendas exclusivas, incluso helados de primera calidad (las colas como en San Geminiano). Todo respira un cierto tono de lugar elegido por los dioses. El primero fue Van Gogh que estuvo internado en el psiquiátrico de por aquí antes del que le cortaran la oreja en Arles, aquí al lado. La verdad es que nos dejó obras maravillosas con fondo de la Provenza, “La Siesta” sin ir más lejos. Hay que hacer el recorrido por este recinto y ver la habitación donde estuvo internado.

Pero antes el día empezó con desayuno con sorpresa en Eygalieres (si Saint Remy huele a pijo) aquí el tufo inunda el ambiente. Solo decir que en cualquier agencia de inmuebles las casas más caras son las de este pequeño pueblo a 10 kms que si fueras el dueño de Apple te lo comprarías para ti solo. Bajemos a la realidad, por cruda que sea. Llegamos, aparcamos bajo el anuncio de mercado (coño otra vez no, las telas, los quesos, polos bolsitas y capazos). Pero estábamos equivocados…son las fiestas patronales y habían toros…si toros (habéis leído bien). Una boulangerie (panadería en Román paladino) donde compramos croissants, y algún dulce autóctono para el cafe…se toma al lado junto a las “porteras” y a esperar que lleguen los caballos y las vacas y empiece la función. Caballos y vacas camarguesas. Una fiesta que se inicia con la actuación de la charanga…pasodobles (Nerva para más señas) y así hasta La Marsellesa a ritmo de pasodoble. A continuación la suelta de las vacas, aunque aquí la modalidad es que vayan arropadas entre los lomos de los caballos. Una y otra vez hasta que ya nos cansamos y volvemos a Saint Remy. Piscina y tarde de recorrido por este bonito pueblo, todo muy chic. La verdad es que puedes perderte en Saint Remy. Se respira un cierto aire tranquilidad pese a la aglomeración del mes de agosto…

Mañana aprovechar el mercado del miércoles, comprar quesos en una tienda que los tienen todos y para casa..