DÍA 13 ATÚN

ATÚN

Ya les dije ayer que entre seguir o volver desde el camping Roche la opción era volver a San Fernando y completar el objetivo de estar un minuto frente al mausoleo de Camarón de la Isla. Nacido en un barrio de esta ciudad y fallecido en Can Ruti de Badalona el año olímpico. Domingo radiante en esta localidad marinera (la armada española, la de ahora tiene uno de sus. fortines aquí. Al lado los americanos en Rota) Gentes vestidas de domingo riguroso, otros con atuendo de turista “yo pasaba por aquí” y flores en este bonito camposanto donde se mezclan las tumbas tradicionales con losas de lujo y los nichos convencionales. Al fondo a la derecha un mausoleo en negro azabache (no podía ser de otra manera) con un José Monje (Camarón) sentado que parece dispuesto a cantar un martinete como los de su padre cuando trabajaba en la fragua. Fotos de rigor para inmortalizar el momento en la “nube” y camino del camino del atún. En busca de donde se desarrolla lo que conocemos como “almadraba” y de donde se “pescan” los atunes rojos que se convierten en manjar de japoneses y lo que nos dejan en salazón…mojada, huevas, ijada y otras delicatessen para el paladar exigente de los demás.

Antes de llegar a ese Barbate inmortalizado en esta ruta nos paramos en los Caños de Meca y en el Faro de Trafalgar.  Primero por ver ese “mar” de dunas cambiantes y que llegan hasta el mar de verdad. Luego para ser participes de aquella triste batalla donde el “ardor patrio” de los Gravina, Churruca o Alcalá Galiano se vio traicionado por la inoperancia de Villeneuve, un francés estirado. Un fracaso que encumbró al almirante Nelson como héroe nacional de Gran Bretaña (con estatua en Trafalgar Square) y el Peñón como premio a la victoria. Con el deber cumplido (visita a Camarón y la dosis patriótica de Trafalgar) nos vamos para Barbate y en concreto a la Cofradía de Cazadores, donde los domingos la regentan los responsables de sala y cocina de la Peña del Atún de la calle Ancha (menos mal que habíamos reservado. La gente llegaba y no podía comer) Allí menú de atún y solo atún en todas sus variantes culinarias. Desde el salazón a la plancha pasando por algún “coupage” con otros productos que maridaban como una “boda in eternis”, Un tartar sobre un ajoblanco, exquisito (me recordó al de Jorge en Es Caló, pero con salsa) Metiendo cuchara para no dejar ni una gota. No voy a seguir porque lo bueno. es que ustedes vayan, reserven, pasen y coman. El precio, correcto, nadie se va a escandalizar (yo sé que algunos estarán pensando eso de: como el Campero nada. Seguramente tienen razón, pero…) Después de este festival un café a pie de puerto, allí donde se esconden las barcas de la almadraba y desde donde se aprecian esas marismas costeras que mejoran el paisaje. Una ciudad, Barbate, donde se respira atún y mar por sus cuatro costados… Con el regusto (parte rumiante del ser humano cuando ha comido bien) camino de Córdoba que está a tres horas de google….Autopista una, luego otra y por último otra…la verdad es que aquí moverse es fácil…o algunos lo hicieron fácil mientras para algunos nunca fue tan fácil sin pagar. En unos minutos empieza el Barça y mañana regreso a la niñez…y no es Mediterráneo…aunque si andaluces de Jaén, aceituneros altivos…cantó el poeta.