ENTRE HIELO Y ESCARCHA
No es fácil reescribir sobre lo que se escribió ahora hace un año. Por mucho que las circunstancias y las emociones sean diferentes. Pero lo vamos a intentar.
La primera vez que hice esta etapa entre Virgen del Camino y Hospital de Órbigo, lo primero que me vino a la mente fue la iglesia de virgen del Camino con las esculturas de Subirats, las vi hacía la friolera de 42 años antes en el viaje de sexto bachillerato (que viejo eres). Luego fue la etapa en la que Gene Kelly se había inspirado para crear aquello de “Cantando bajo la Lluvia”…25 kms (hoy 27,310 kms) bajo un aguacero que hacia temblar el poncho. La segunda fue una etapa bonita…la tercera muy similar a la anterior con la salvedad de que uno de los tres no la pudo acabar (directamente al fisio).
La de hoy ha comenzado no siendo tres, sino cuatro con la incorporación inestimable (en lo gastronómico de mi amigo Paco)…impagables las dos noches (yo solo una) en Casa Mando de León al son de una excelente morcilla y un souflé de final para completar un “in creciendo”, acompañados de un Pazo de la Garduña de Abadía Retuerta que no tiene más explicación. El resto de los platos digamos que correctos para lo que se le exige a un local de esa fama.
Hecha esta salvedad, volvíamos a la negra noche (las siete y media en esta latitud es eso noche) un km y medio de propina desde el Hostal Soto (calidad-precio recomendable)… sin desayunar (lo digo porque ha marcado la etapa)..dos grados bajo cero y a caminar, los coches con un dedo o medio de hielo, menos mal que es domingo…Las primeras luces ya nos han mostrado un panorama singular, escarcha a derecha e izquierda de la N-120 que será nuestra fiel compañera esta etapa. Ya hemos pasado Valcárcel de la Virgen (ni un bar para desayunar), la pregunta era “qué viene después”…San Miguel del Camino (allí seguro que si, pues no) todos los bares cerrados…más que hambre había necesidad. Mientras la escarcha era la protagonista y poco a poco íbamos descubriendo el hielo en los charcos (supongo que a medida que avanzábamos la noche había sido algo más fría).
Clavabas los palos para comprobar el grosor y en algunos había que apretar para romper el hielo. Por fin un polígono industrial con el Hostal Avenida en el horizonte…desayuno a la vista (pues quedaban 3 kms, lo que hace el deseo). Por fin sobre las diez y diez de la mañana tras 13 kms de hambre llegamos al desayuno (que os puedo decir que ha sido contundente…de bocadillo de lomo con queso y pimientos). Y a seguir. Primero el árbol de las granjas, que se han trasladado de un lugar pasado San Martín de Órbigo hasta Villadangos del Páramo…hay muchas, pero muchas. Y desde ahí por un “bidegorri” de tierra paralelo a la N-120 llegamos a Hospital de Órbigo…foto del depósito de Agua (curioso), des la iglesia de Puente Órbigo, con sus cigüeñas de rigor…y ya al puente, la atracción principal de este final de etapa. Majestuoso dejando paso al río Órbigo y siendo testigo de las luchas medievales de junio en esta localidad. Un kms más (ven como son más de 27 kms) y hasta el hotel El Paso Honroso (nombre que se le da al puente). Muy recomendable…comida y cena de menú excelente y mañana hasta Santa Catalina de Somoza, ya en las estribaciones De la Cruz de Ferro…(nos espera un cocido maragato). Si tienen tiempo hay que ir a Castrillo de los Polvazares…no se lo pierdan.