LAS FIESTAS 2005

Ya estamos de fiestas. El 2005, con el Atasko al frente las Fiestas de Olba empiezan fuertes. Nada más pasar San Eusebio un toro embolado, como el que no quiere la cosa, no vaya a ser que se nos olvide eso del cuerno y el fuego. Pero antes el pregón, con amplios deseos de felicidad para todos y ya tenemos a San Usebio, Catalina y la UMO haciendo las delicias de grandes y pequeños.

Ya en la boda apuntó que era escritor de primera en eso de traducir sentimientos al papel. Pero ahora, el amigo Carlos, marido y padre se ha destapado como pregonero mayor. Como nos gusta escucharte.

Ya estamos en Fiestas proclama el pueblo. Y a la primera de cambio embolado. Cuando no se nos ha pasado la resaca de un San Usebio lanzado al estrellato, el Atasko no nos deja respirar y a ritmo cansado pero con buen ánimo encontramos a toda la tropa masculina de esta gran peña montando barreras, con un Andreu siempre solícito a resolver problemas de llave inglesa o tuerca que se resiste.

Para este año siguen en cartel:

LA CENA

Nos estamos acostumbrando a los sonidos de nuestra tierra y a un buen sobaquillo. Cada día va más gente a esto de la cena popular.

EL GUIÑOTE

Este año el Guiñote viviente cambió a uno de sus jugadores. Al bueno de Tomás, que ya nació siendo maestro lo ha sustituido una mujer del gremio, que atiende al nombre de Aurora. Que mejor sustitución que uno que da clases por otra que las imparte. Fortuño se mantiene pese a su “ignorancia” en el arte del naipe. Miguel el Cestero, bueno, nos trajo un pulpo a modo de soborno y caímos en la tentación. Y Conchín, si la de Cardas, exhibió el garrote y cualquiera le decía que no. Un partido reñido con jotas, joteros y rondalla.

FIESTA INFANTIL

Por lo visto en estos días de Fiestas, eso de la procreación es una nueva moda en Olba. Mientras los unos van creciendo, los otros van aumentando la familia. Este año tres sonados nacimientos. Un Paquito para un Paco. Un Ángel para otro Ángel. Y Una Bruna para otro abuelo primerizo. Tres eran tres “los hijos de Helena” y a estos de aquí a unos años no hay quien los pare. Darles tiempo y veréis de lo que son capaces. De casta le viene al galgo.

EL TORO DE ELÍAS

Se le empiezan a notar los años. No está viejo, no. Pero si algo cansado. Ese “toro” que hace las delicias de niños, grandes, abuelos y demás congéneres, sigue teniendo dos carburadores y amigo cuando se le pone en marcha el segundo, que mal lo pasa el bueno de Pepito corriendo plaza arriba como si fuera un chaval para esquivar lo que un niño hace con un simple quiebro. La edad amigo “toro” no perdona ni a los buenos.

LAS JOTAS

Se nos amontona la faena, pero siempre son bien recibidas las jotas, especialmente para un público que tiene más recuerdos que otros. Y si la calidad no fue la mejor, amigo cuando salieron los nuestros como cambió el panorama.

SAN ROQUE

Hay que buscar la referencia religiosa y en este caso, como en tantos otros y lo que te rondaré morena. San Roque es la mejor muestra de que creyentes y no creyentes, seguro que creen en San Roque.

LOS DISFRACES

Llegamos a los disfraces casi sin darnos cuenta. Allí están los más y los mejores con todas sus galas de trapero y mercería. Algunos se lo trabajan porque quieren ofrecer algo más que un simple disfraz de Peris Hermanos. Esta es la muestra:

no ya lo saben, para mayor información vengan a nuestro pueblo.

Hasta el año que viene