SOBRADO DOS MONXES-ARZÚA

Es la etapa del final de una Galicia del siglo XXI que todavía conserva elementos y costumbres de otros siglos. Nadie duda de que en muchas cosas esa Galicia se ha adaptado a las “comodidades” que ofrece el progreso en todos los ámbitos. Pero también es una Galicia que sabe utilizar lo que aprendió de sus mayores y cuando digo mayores me refiero a todos los que  pasaron antes, no los de ayer simplemente. Se nota en muchas cosas que pese a quien pese no han cambiado mucho.

La imagen del paisano, la paisana y el perro llevando las vacas al prado no es gratuita. Es la misma que hace mil años si hubieran fotos de aquellas. Pues hoy esa Galicia se acaba en Arzúa. Mañana ya entramos en una Galicia condicionada por la moda del Camino de Santiago y adaptada a esa nueva industria que nos lleva hasta O Pedrouzo y desde allí a Santiago. También es la Galicia que se acerca a un núcleo urbano importante y que determina una tipo de arquitectura que pretende ser rural pero dedicada a lugares dormitorio para quienes trabajan en la urbe. Incluso segundas residencias de esos mismos trabajadores. La proximidad del aeropuerto y las dos televisiones influye en al etapa de mañana.

Pero hoy nos quedaban ciertas cosas que no podemos perder. El paisaje que titularíamos como “verde sobre verde”. Las vacas en el prado ajenas a lo que acontece más allá de la cerca. El sonido de los perros al ladrar cuando pasas por sus dominios, etc. Las aldeas que siguen siendo aldeas. Las parroquias con sus cementerios al lado y que  transforman  paisaje. Si además le añades la lluvia a ratos, el sol que nos ha venido acompañando en una extraña sequía dados los tiempos que corren y un granizo traidor surgido de una pequeña tormenta con vientos de poniente. Eso si soplaba con ganas el condenado. Pues con todo eso nos despedíamos de esa Galicia que ha sido recurrente en estos últimos días.

La otra cosa importante de esta etapa es que en Arzúa coincides con el Camino Francés…si el de los caminantes, peregrinos, turigrinos (vienen desde Sarria) y algunos “churrimanguis” que aprovechan los puentes para hacer unos kms, sellar y decirles a sus amigos aquello de “a mi me vas a contar que es el Camino De Santiago”. Pues esos también están hoy en Arzúa. Mañana no porque el martes tienen que regresar tras el “esfuerzo ” y algún taxi que hace su agosto en mayo. Hoy la ciudad tiene algunos habitantes y “un millón” de peregrinos de todos los ámbitos. El miércoles recuperará la normalidad de un día de Camino sin puentes largos…

Dormir en Casa Teodora, de toda la vida, 36 € la individual…es Arzúa, es puente y qué le vamos hacer.

Comer en Casa Chelo, muy recomendable. Cocina casera hecha por la abuela. No se lo pierdan si pasan por Arzúa.