Hoy tocaba la sección “paisajes” y “pueblos” de la Selva Negra. Un paseo corto en kilometraje, pero intenso en ambos capítulos. Repasando (anoche) el plan previsto se nos ocurrió añadir el lago Titisee como primera parada del día. Después de hacer los deberes domésticos que exige el buen funcionamiento de la “Holly” a eso de las nueve salíamos de Friburgo rumbo al lago (con la esperanza puesta en encontrar el primer café después del desayuno) La primera sorpresa nos la daba la propia carretera y los paisajes que la conforman…colores de otoño por doquier, un desfiladero con dos rocas enormes (pasas por el medio) todo a 30 por hora siguiendo una caravana de coches que no sé a dónde van. Las casas cortadas por el mismo patrón, enormes, con muchas ventanas y los tejados recubiertos de paneles solares (en esto de la energía limpia nos llevan casi un siglo de ventaja) A medida que pasaban los 28 kms, íbamos pensando que esos edificios de dos plantas, pero de grandes dimensiones, eran hoteles. Craso error, son casas (unifamiliares) donde caben más de una familia por numerosa que sea. Llegamos a Titisee y me confundo de salida…el error nos lleva a una vuelta completa al lago,12 kms de propina por unos paisajes que quitan el hipo…media hora más tarde vuelta a empezar y al parquing “general” como si fuera verano. Vacío, aprovechando la circunstancia y la vocación picaresca del español medio, aparco la “holly” en el reservado a coches. No me he bajado de la furgo que un avispado alemán con cara de pocos amigos me dice “aquí no, espabilao” (pero en alemán) “si no hay nadie”, le respondo en “lo que puedo” de Alfredo Landa en “Vente a Alemania, Pepe”. Ni caso, ponte en marcha y a tu sitio…por algo les llaman “caps cuadrats”. Ni una pizca de imaginación…la partitura se sigue, no se interpreta. Café con propìna a eso de 2 grados (luego llegaremos a 1) fotos de rigor del lago y de los patos, ¿no tendrán frío, los puñeteros?. De ahí a las Cascadas de Triberg…16 € por ver la naturaleza con acompañantes (lo digo porque estaba a petar…quítese que me toca la foto a mi…casi ni un selfie te permiten…dese prisa que el niño se hace pis te incriminan unos padres, primerizos, claro) La verdad es que vale la pena (es Europa, si has visto Iguazú o Victoria, estas hacen el ridículo) Fotos, videos que podréis ver a continuación. Vamos en busca de los relojes de cuco, hasta donde está el mecanismo más grande del mundo…otra de publicidad barata…Schonach…una señora que cobra, una casa, un mecanismo de madera y un cuco con la voz ronca de haber pasado mala noche (ver vídeo) Podéis pasar por alto la visita. Casi la hora de comer y nos quedan cincuenta kms hasta destino final, con cortes en la carretera y desvíos con estrecheces que hasta la “Holly” se encoge de vez en cuando (por si acaso) A eso de las dos y media (con más hambre que un maestro de escuela en la época del racionamiento) llegamos a Gengenbach (Bueno al parquing de autocaravanas a menos de 1 km del centro) Preparar el festín (comida casera con aperitivo de paté de campaña) nada más terminar a ver este pueblo (con café en el bar del centro. Por cierto, si en Granada una caña lleva acoplados unos boquerones, aquí un simple cortado lleva de tapa una porción “generosa” de un bizcocho con frutas variadas. Rosa, como ha pedido descafeinado, entienden que está de régimen “riguroso” y se abstienen de la tentación, considerados) Gengenbach, una pasada. Desde sus dos puertas de entrada al centro hasta cualquiera de las edificaciones, civiles o eclesiásticas. Lugar de obligado cumplimiento. Pero volviendo a los orígenes del día…lo destacable es sin duda el paisaje de estos apenas cien kms a través de la Selva Negra. Colores de otoño, combinados con toda la gama de verdes imaginables, prados, árboles de hoja perenne, abetos altos, medios y bajos (recién plantados, como para árbol de navidad en casa de pobre) Vacas (casi todas combinan el marrón y el blanco) caballos de varios pelajes…ovejas de mucha lana…en una palabra “Impresionante”. Tengo que informarles que en ningún supermercado tienen “pimentón de la vera”, inaudito. Habrá que improvisar la sopa con “paprika” dulce, claro. Mañana Baden-Baden…similar a Torres-Torres.
