El día era largo, pero corto en visitas. Demasiado aeropuerto de transición hasta Capadocia…primero de Izmir a Estambul, parada técnica, dos horas viendo pasar gentes y más gentes frente a una cocacola ligth. Pero no había más solución que esa…aquí mientras no se diga y haga lo contrario todo pasa por Estambul.
La mañana empieza con un viaje de 20 kms hasta Kusadasi olo que es lo mismo El Centro turístico de este mar Egeo donde dicen los que se acuerdan paraban todos los cruceros del Mediterráneo para visitar Éfeso. Hoy te dicen que eso era ayer y lo dicen con cara deprimida de quienes necesitan recuperar la base de su economía.
De ahí y sus playas donde está el cartel de la más larga de Turquía, nace una ciudad de cien mil habitantes que en verano alcanza el medio millón…se imaginan como es…no fui capaz ni de sacar fotos del enjambre que eso significa… Ni siquiera se parece a Benidorm. Trata de ser un LLoret de Mar pero con un crecimiento urbanístico más caótico.
Eso si te sorprende un Hospital al estilo de Hotel Hilton de cinco estrellas, nuevo (del año pasado) y con las mejores vistas a la bahía. Hay quien se pone malo para que le den habitación gratis con vistas al mar.
Luego hoteles, apartamentos, bares, restaurantes, souvenirs, alquiler de coches, agencias turísticas y lo que ustedes cataloguen en ese apartado. Un paseo peatonal alrededor de una fortaleza y alguien dijo “voy a veranear”…por favor no me esperen.
Paseito en coche y nos paramos para unas fotos a un castillo dentro de la bahía a modo de defensa para los piratas…
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De allí carretera y sol hasta Sirince… un camino entre olivos, algunos frutales y finalmente cepas por doquier…ah, me dejaba y algunas curvas al estilo paella que todavía le dan un aspecto más pintoresco y rústico a este enclave. Llegamos a Sirince, dicen que el primer pueblo que fundaron los cristianos de la época de Cristo (en Éfeso predicó San Pablo y vivieron la virgen y san Juan)…Curiosa arquitectura con casas de dos pisos blancas y techos de teja roja…ayer refugio de perseguidos y hoy todos dedicados al turismo y algunos a la producción de aceite y vino pagés…
Todas las casas tienen su planta baja dedicada a un comercio, sea de lo que sea. No importa a que te dediques mientras te dediques a vender a los turistas. Ayer creo que éramos una treintena…Aquí recalaban los cruceristas y esto siempre era “agosto” hoy es simplemente “un día de invierno y con lluvia”…
Mujeres al ganchillo (algo habrá que hacer) y hombres a la caza del único turista que había “pasen, pasen”…”bueno, bonito y barato”…todo ello sin molestar, con la máxima educación. Me gusta esta gente de Turquía. Una iglesia cerrada a la que se llega por calles empinadas y te quedas con una imagen de lugar que era de relleno en nuestro programa y que después de conocerlo me hubiera sabido mal no haberlo visto.
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A comer en restaurante de carretera habilitado para autocares de turistas (lo de siempre, aunque la carne estaba muy bien hecha) y al aeropuerto de Esmirna después de 50 minutos de viaje. De ahí con Pegasus (excelente compañía, deberían aprender otras Low cost. No dejarme decir el nombre) a Estambul y después de dos horas a Kaisery antesala de la Capadocia. Autobús como anchoas en lata de 50 piezas y hasta Goreme…lluvía y mal presagio…Hotel Suite Caves Capadocia…excelente y a dormir que a las 4 y 20 viene a por nosotros para subir en globo…pero lo que falta os lo cuento esta noche.
