COPENAGUE 1

Hemos cambiado de país. Alemania desde la Selva Negra hasta Hamburgo ya quedan atrás. Esta mañana, bien temprano hemos arrancado desde la ciudad alemana y por la A-1 hasta la isla de Fehmarn, frontera marítima con Dinamarca. Antes un alto en el camino para el café con tapa y otros menesteres. Caro y cutre que es lo peor que te puede pasar…porque si pagas como ayer en la zona pija, pero estás más que a gusto casi te parece barato. Todo lo contrario de hoy, aunque había más sorpresas en cuanto al precio. En Puttgarden tomamos el Ferry hasta Rodby (territorio danés) 45 minutos de travesía y a 5 pavos el capuccino (quién da más). El barco ni se ha movido, aguas mansas o barco que navega de vicio (las dos cosas) Desde allí hasta Copenhague cerca de dos horas en un día “perro” de esos que invitan a quedarse en casa y ver las cosas que suceden por la tele con chimenea y pantuflas. Temperatura constante, nueve grados, pero la sensación era…(yo tenía mucho frío) Antes de llegar al camping de hoy…Absalon a unos cinco kms del centro de la ciudad, parada en el super…pero el Aldi que habíamos elegido estaba de cierre temporal y allí no había más que agua con gas…tela marinera. Buscamos otro al lado y santas pascuas…La verdad es que, pese a la lejanía, el lugar merece la pena…seguridad y servicios de primera, aunque esto parece una ciudad de vacaciones…

Después de una comida, apañada en “casa”, a la aventura. Un tren.  que te deja en el centro de la ciudad. Aquí hay que hacer un inciso sobre la cultura de la bicicleta en esta ciudad o en este país. El tren lleva un lugar específico para dejar las bicis o los patinetes. Los carriles bus-taxi, aquí son para las bicis. Primero ellas y después los vehículos a motor (motos ninguna, con la que estaba cayendo) Del tren hasta el ayuntamiento (ya de noche y son las cuatro) a buscar la calle Stroget, dicen las guías que la peatonal más larga de Europa…otro Portal de l’Ángel pero de más de 2 kms. Por partes, al inicio todo era cutrez, con souvenirs o tiendas para turistas que se han olvidado algo…una tienda de Lego y luego otra (se nota su procedencia) A media que avanzas por esta calle vas entrando en algo más distinguido. Llegas a un cruce y allí el primer mercado de Navidad que vemos en este viaje…los renos de leds, el Papá Noel con su trineo…las fotos para el recuerdo, locales, Erasmus, turistas (nosotros, con unos hindús) y los inevitables “cudeiros”, está en todas partes. Desde ahí con Louis Vuiton y Prada presidiendo el camino empiezan a aparecer todas las marcas cual “Rodeo Street” que les voy a contar que no sepan…el chirimiri no hacía mella en el personal…de una tienda a otra tienda y así hasta llegar a otra de las plazas de esta urbe…y colorín colorado esto es todo por hoy…mañana volvemos al tren y si es posible a seguir el listado de cosas que ver en Copenhague…les aseguro que la sirenita cae…