FICHA TÉCNICA:
22,7 kms. Pasos intermedios: Santiponce. Ruinas de Itálica.
Salida a las 8,05. Llegada a las 13,50
En Guillena, Hotel Francés. Calidad precio razonable. Comida y cena de batalla a buen precio.
ETAPA:
Primera etapa de este Camino muy asequible para empezar. El miedo de todo inicio de una aventura de esta índole donde no sabes si tu forma física te va a responder se va disipando a medida que vas cubriendo kilómetros.
Salir de Sevilla por Triana, pasando por la puerta de El Cachorro ya es un buen inicio. Luego sigues por la orilla del Guadalquivir en un sendero artificial para andantes, caballos y bicicletas. Cómodo y vistoso a la vez.
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Cuando crees que todo va a ser de esta guisa te trasladas, también por un sendero a un camino asfaltado y unA carretera hasta Santiponce. Antes habremos dejado a la derecha el Monasterio de San Isidoro del Campo. Ciserciense del siglo XIV, aunque ha sido modificado posteriormente.PEn Santiponce hemos almorzado a lo andaluz, tostada con manteca colorada, o lo que es lo mismo colesterol en vena…
Con el estómago en su punto hacemos un alto en el Camino en esta localidad para visitar las ruinas de Itálica. Ciudad romana fundada por el general Publio Cornelio Escipión allá por el año 206 a.C. En ella nació el emperador Trajano y toda la familI de Adriano.
La visita tiene dos puntos recomendables. El anfiteatro donde cabían hasta 25 mil personas y los mosaicos como el de l Casa de Neptuno. El resto es más de lo mismo en este tipo de lugares.
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Seguimos por la carretera A-8078, que “jartá” de asfalto hasta un pista de servicio, bendita tierra, que ya no dejaremos hasta las puertas de Guillena.
Por ahí se cruza el Arroyo de los Molinos, que suele llevar agua como para descalzarse. A cinco metros hay un paso adecuado para no tener que descalzarse. Es la única dificultad de la etapa. Finalmente Guillena.
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Guillena cuenta con una iglesia dedicada a la virgen de La Granada del siglo XIV, pero extremadamente reconstruida. Un pueblo típico de Andalucía con casas emblanquinadas para repeler el sol y el calor de los duros veranos. Su paisaje va entre la Vega del Guadalquivir y la Sierra de Sevilla. Eso ya será de la segunda etapa que nos lleva hasta Castillblanco de los Arroyos.
