CAMINO DEL NORTE

Cuando me planteé hacer el Camino De Santiago allá por el 2010 fue como vencer un reto personal…”¿podré hacerlo?”me pregunté…sabiendo que era un vago vocacional y que eso de andar queda muy bien en el paseo marítimo de Vilassar, en La Mola de Formentera o apurando, lo de pasear por la carretera o el río del Olba. Si por aquel entonces me hubieran dicho que hoy 3 de mayo de 2017 habría hecho 6 Caminos y casi medio (León-Santiago), os aseguro que me hubiera reído en mi interior pensando que alguien se había vuelto loco. Incluso recuerdo en Puebla de Sanabria, ya con el de La Plata avanzado que un paisano nos relataba frente a unos huevos fritos en el hostal Carlos que era su 14 Camino…no os relataré por ser respetuoso lo que pensó de aquel señor de aspecto atlético y con kilos de fibra, uno que tiene kilos de “tocino” como dice el franchutis.

Pero con cada Camino vas creando dependencia y si no que se lo pregunten a quién lo ha hecho…Y llegas a la conclusión que el gran reto es el del Norte, ya sea por la costa o por el Primitivo. Y aquí estamos.

Durante 36 etapas conoceremos desde esta plataforma lo que pasaron y vieron los peregrinos que escogían la ruta de la costa para llegar a Compostela.

La primera pregunta a la que hay tienes que responder es: ¿Es el más difícil?…Si. Pero es un si condicionado por las dificultades orográficas. Vas superando valles y siempre la misma pregunta “¿por qué monte nos sacará?”. Sabes que acabará en una subida y una bajada de justicia.Pero a medida que avanzas y vas llenado tu cerebro de las imágenes ya no se hace tan difícil…Será porque en el fondo tendemos a olvidarnos de lo malo para guardar lo bueno en el procesador. Si lo piensas con la frialdad del “día después” es el más duro, sin duda.

La segunda pregunta es: ¿Es el más bonito?. Si, sin condicional añadido. Es un si desde Irún hasta que se acaba en Santiago. Hay muy pocas etapas prescindibles (quizás los pasos por las ciudades, Bilbao especialmente, o la de Portugalete con el bidegorri de 11 kms o el bidegorri asturiano de Avilés). Pero al final siempre encuentras alguna historia paralela que te reconcilia con esa Etapa. Algunos cabreos con quienes se encargan de trazar el Camino por las vueltas inútiles y poco lógicas que das (Pola de Siero fue un claro ejemplo). Pequeñeces al lado de tanta belleza como llegas a ver en la costa de Euskadi, Cantabria, Asturias o Galicia. Incluso en el interior de Galicia pasando por la Terra Chá (mi gran desconocida). Solo un pero…debería anunciarse en todas las guías la posibilidad de una etapa más en Ribadeo, la que va desde la Praia das Catedrais hasta Ribadeo por la costa…no se puede pasar a 13 kms y no llegarse hasta allí.

Todos los peregrinos que hemos encontrado son repetidores…Españoles,esàñolas, austriacas, noruegas, alemanes,alemanas, franceses, portugueses, ingleses,inglesas, chilenos, italianas, una coreana que iba al revés (venía De Santiago) y algunos personajes que parecían habitantes del Camino y de nacionalidad indeterminada…El máximo que hemos contabilizado en una población han sido unos cuarenta…sumando albergues y pensiones varias. Nada comparable a lo de Arzúa donde seguramente llegaríamos a los 500 solo en el Camino Francés…dadas las fechas con mayoría de madrileños que comenzaron en Sarria (división de turigrinos y churrimanguis), pero todo es Camino a la postre. El Santo no distingue distancias a la hora de hacer la cola para la Compostela. Y quedan los de la bici que esta semana atrás y por el francés han sido un sin fin….

No pienso cumplir aquello de “al séptimo descansó”. Ya estoy preparando el próximo…

Lo dicho, se acabó este y a pensar en el siguiente…