27,6 kms
Salida a las 7,30 horas. Llegada a las 14,15 horas
Pasos intermedios: O’Pino. Boavista. Salceda. Arca. O’Pedrouzo.
HOTEL XAN XORDO. Bien. 55 € la doble. En un lugar precioso, una especie de pazo.
Comida en Rest. Sampaio, muy aceptable por el producto y elaboración. Caro para lo que se ve por aquí.
Una ligera subida hasta A Calzada nos saluda nadas más empezar esta larga etapa 27,6 kms hasta Lavacolla. Toboganes y más toboganes. Aldeas tras aldea sin nada que destacar. Fotos de la Galicia profunda. Sigue la romería de peregrinos de todo tipo y condición. Esperando el autobús en la parada de Arzúa al menos 8 turigrinos.
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Lo divertido ha sido ir descontando kms desde los 34 de Preguntoño hasta los 13 del paso previo por el aeropuerto. Arca, O’pino y O’pedrouzo como final de etapa ha hecho que disminuya en el trazado final de la etapa el número de caminantes. Un italiano que iba al revés en un tramos de dos km y medio ha contabilizado más de 120 lo que indica que mañana en Santiago seremos más de 400. Un horror, pero así está montado. Nada destacable en esta etapa anodina entre asfalto y bosques de eucaliptos.
Entre Arca y Lavacolla una subida muy larga y en algún punto exigente.
Hoy hemos visto caballos. Entre los conocidos dos azafatas de Air Nostrum, muy agradables.
Publicado en Diario de Teruel
A SANTIAGO OCHO
Esa es la distancia que habrá que cubrir mañana a primera hora para llegar hasta la Plaza del Obradoiro en Santiago de Compostela. El reto de estos 763 kms desde Saint Jean de Pied de Port está casi a punto de ser cumplido y eso te crea un estado de excitación especial, como cuando entras en vísperas de algo importante. Durante esta etapa que se iniciaba en Arzúa me he dedicado a saborear como iban cayendo los kilómetros en los mojones, primero el 34, luego el 33,5 y así hasta el 13 donde los indicativos han desaparecido y he tenido que acudir a la guía me fabriqué durante los meses anteriores a iniciar el Camino y que se ha venido cumpliendo con pequeñas variaciones casi anecdóticas.
Hablando de anécdotas por fin hemos podido ver a los que hacen el Camino a caballo. Ciclistas a montones, peregrinos y caminantes como para una romería, pero de caballos ni uno y mira que excrementos había. Esta misma mañana, por sorpresa, dos caballos con sus caballistas se dirigían a Santiago. Menos mal que también existen.