Cada día en La Ernestina es una sorpresa. Porque la monotonía de levantarse a las 6, 15 minutos de la madrugada, desayunar, recoger tus viandas y subir al 4×4 para empezar una nueva jornada se convierte gracias a ese qué te vas a encontrar frente al océano en una experiencia nueva y que te atrae hasta la dependencia. Todos, menos nosotros, los que están estos días en la estancia son repetidores y ya piensan en su nueva aventura del año que viene. Yo también.
Pienso que la mejor descripción de lo que se siente en la ensenada o en el faro esperando las indicaciones de Juan Copello son las fotos que van sucediéndose durante cada uno de los días. Mejor los momentos donde la adrenalina se acumula en nuestros cinco sentido esperando que aparezcan “las chicas”
 Avisando |
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Tres de JC
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Maga en un varamiento total (la foto está desenfocada. Pero el documento es único. Tomada a las 20,00 horas,con un objetivo 400. Tirando a 3200 Iso).
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Los esfuerzos por volver al mar de Maga
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Ustedes y yo volveremos en 2013….
