El RÍPIO
Esta es la primera de las etapas que tendrá nuestro tercer viaje en la Holly (autocaravana) Esta vez por la península, sin salir de la España en elecciones, vaciada o con algo de naturaleza escondida.
El titular de este día no obedece a lo acontecido en casi toda la jornada. Sólo al final de ella se ha justificado, pero ha sido determinante como sorpresa, la segunda del día. Salíamos sobre las diez de la mañana de Vilassar de Mar. Después de un desayuno en Espinaler del polígono (lo habitual en estos casos. Poca imaginación, pero el atún escabechado me puede) Destino Andorra con parada intermedia en Seu de Urgell para recoger a unos amigos y completar el objetivo de esta jornada. Que no era otro que comer en el Diamant de Andorra la Vella, regentado por Nandu Jubany y reencontrarnos con algunos de los profesionales que conocimos en Formentera. Además de con algún amigo que reside en ese país. Hablar de Andorra en febrero de 2022, cuando uno tiene recuerdos de hace más de 35 años de una Andorra diferente, menos masificada, con espacios abiertos y no la actual donde los espacios, aquellos, hoy son construcciones en las laderas que hasta da miedo asomarse al balcón de los pisos de allá arriba por miedo a caernos hasta los comercios de allí abajo. La anécdota del día fue una encuesta del programa de Helena Garcia Melero en TV3 donde se preguntaba a los andorranos por la supresión de la obligatoriedad de la mascarilla en exteriores. Uno de los “andorranos” que aparece en esa encuesta, residen en Formentera y pasaba por aquí, sin más pretensión que comer con amigos.
Después carretera y manta hasta un lugar llamado Valfarta, en Huesca (no estaba en las previsiones) cerca de Bujaraloz, donde el camping la Estepa nos ha acogido casi en medio de la nada. Cuando uno se fía de Google y decide seguir sus consejos vía itinerario idóneo, puede que sea así. Rápido y exento de emociones porque es muy previsible. Pero a veces ocurren cosas que entran en los anales del anecdotario de un viaje como este. Siguiendo la pantalla y la voz autoritaria y segura de la señorita del Iphone nos traía desde Andorra hasta este lugar por carreteras lógicas, la C-14 y otras de la parecida nomenclatura y buen estado hasta coger la A-2 entre Balaguer y LLeida para en Soses cambiar a la AP-2 y seguir la ruta lógica hasta Bujaraloz. Pues no Google Maps ha decidido traernos por la N-2 y luego por pistas de concentración parcelaria hasta Penalba y de ahí el camino más corto hasta aquí, que no es otro que una camino de rípio, en una noche oscura y con un “no sabemos dónde vamos” hasta que aparece la primera señal, junto a un pueblo de 25 habitantes, del camping y por fin se te quita el susto y aparece el cabreo contra las prácticas de Google. Ha sido la forma más extraña de atravesar una parte de los Monteros, sin ser vistos. Mañana temprano a buscar la lógica. Autopista hasta Logroño y dejémonos de aventuras en noches oscuras.
El camping perfecto en servicios. Si pasáis por aquí usando la ruta lógica no dudéis en pararos.