Las fiestas de este año mantuvieron la tónica de las anteriores. Seguimos instalados en que “los santos advenimientos”, vamos quienes vienen de fuera son mejor que lo nuestro. Y así nos luce el pelo. Nuestra UMO merece un concierto en la plaza, con escenario, con sillas de casa y un público entregado que quiere oir a los suyos.
Dicho lo que es de justicia, por si aprenden. Entramos en materia.
Novedad, aquí si podemos hablar de novedad. Ha nacido por mor, diseño y construcción de Pepita Benlliure una Catalina que está llamada a llenar la soledad de San Usebio, bendita sea la mujer que acompaña al hombre en sus menesteres y deambular por los agostos de Olba.
Arreglado el primer día de fiestas, las imágenes son elocuentes de la celebración de este nacimiento. Hay que destacar un cuadro de jotas extraordinario, del Centro Aragonés de Valencia y a su lado el ardor interpretativo de quienes mejor representan nuestra jota en Olba. Para muestra un botón.
Que bien cantan. Pili y Paco o hay quien les ha llamado Paco y Pili. Fue uno de esos momentos en que a uno le gusta ser de Olba.
Y entre misas, procesiones, y orquestas llegamos a la gran noche de los disfraces. El mundo del medioevo y una nueva experiencia en lo de engalanar el pueblo. Era noche de antorchas para darle realismo a ese siglo XIII que se nos avecinaba.
TODO EMPEZABA BIEN: Buen encendido; el esfuerzo de Andreu; el “oh” de admiración.
La verdad es que estaba bonito el pueblo. Pero al poco del encendido, Javier, empieza a pensar que aquello tiene su peligro, no lo veía claro. Rápida actuación de la banda de bomberos de la comisión y para final la bronca.
De vuelta a la normalidad, la fiesta continua y todos expectantes ante el gran desfile de los disfrazados, ya en conjunto o individual, incluso por familias; que de todo hubo en esta Olba medieval.
Han echado un vistazo a la muestra?. Ven al jurado deliberar sesudamente, como si les fuera la vida en ello?. Adivinan quien ganó?.
Pues no, esas no. En uno de los tongos más escandalosos de los últimos tiempos. La Comisión decide que los ganadores son Yayu File. “Consumada la injusticia” la fiesta sigue.
Sigue y de que manera. Para unos en forma de campeonato y para otros en forma de magnifica juerga por el mismo precio. Sirvan estas imágenes dónde estaban unos y otros.
Uno de los momentos más esperados, EL EMBOLADO DE ELIAS. Este año, pese a una lesión del “toro” Elías; allí estuvo fiel a su cita con los minis, con los no tan minis y con los otros, los del miedo, que algunos, como este relator, se fue al balcón, no sea que….
De ahí a los toros, cuatro embolados, algunos más de calle que de plaza y otros, pues eso, embolados. Una tarde de novillos, vaya tarde, de los mejor y una mixta, con dos becerras que hicieron las delicias del público. Todos de Germán Vidal, que atesora más aciertos que errores.
Y antes de acabar este relato de lo que fueron las Fiestas de 2003, hay que hacer mención especial del Guiñote Viviente. Segundo año consecutivo y va consolidando su inclusión en el calendario de fiestas como un atractivo más.
De nuevo la idea de Antonio Dueñas, con la pluma de Enrique Giner y la organización de Elisa Caus y Mercedes Molla. Todo un éxito.
Repitieron jugadores, Marcelo, José Manuel , Antonio y Vicente. Repitieron cantadores, Pilar Fleta y Paco Clara y rondalla………, ahí están todos. Pero no repitieron las Cuarenta, las Veinte y otras jotas, porque la inspiración de nuestro poeta particular afinó todavía más para regusto de sus seguidores.
Como colofón, reportaje en TVE y ya somos conocidos hasta en la Patagonia que hasta allí han llegado los ecos de este juego popular, donde unos juegan, otros miran y los más lo intentan.
Consumidas las Fiestas de Agosto de 2003, ya solo nos quedaban las de septiembre. Que también pasaron.
Hasta el año que viene