No hace mucho comentamos en este foro de facebook que el “procés” entraba en un impasse de difícil salida debido a las dificultades que tendría una salida soberanista para catalunya condicionada por los votos de la CUP. Ni Junts pel si, ni la CUP han dejado de ser estandartes del independentismo en Catalunya. Donde está la diferencia es en cuestiones ideológicas y en la praxis final de la acción de gobierno. A alguien le ha extrañado el posicionamiento de loas bases de la CUP?. Cualquier otra decisión hubiera sido traicionar a los principios en los que se fundamenta este movimiento social.Alguien se imagina a las grandes corporaciones con mando en plaza dando apoyo a un govern donde la base programática esté escrita por la CUP y la semántica la ponga CDC. Amigos la política actual está directamente relacionada con la situación económica de los ciudadanos de un país. Sin ir más lejos la disyuntiva actual en Catalunya se hubiera solucionado si hace unos años léase si PSOE y PP se hubieran puesto de acuerdo para llegar a un sistema de financiación autonómica más justo con los que pagan. Les aseguro que las cifras de ” a favor” de la independencia se hubieran mantenido entorno a aquel de 28% o quizás en poco más del 30%, pero nunca hubiera llegado a ese 47,8% de las últimas elecciones. Pero quien le decía a las autonomías “menos o más” favorecidas que se había acabado la bicoca de la mal llamada “solidaridad interterritorial”. PP y PSOE seguro que no.Estamos donde estamos y ahora con la decisión de la CUP que a buen seguro ratificará la asamblea plenipotenciaria nos vemos abocados a unas nuevas elecciones donde la fidelidad de voto a los partidarios del “procés” puede quedar en entredicho…aunque dada la situación seguramente será la única solución viable para recuperar la ilusión que en estos dos meses después del 27S se ha ido perdiendo…Una realidad que estaba ahí desde que Junts pel si no consiguió ese el diputado número 65 y que los ha dejado a merced de un partido en el que la coherencia de planteamientos es su principal seña de identidad.Nadie puede llamarse a engaño. La derecha y el centro tienen mal encaje con la izquierda radical.
No hace mucho comentamos en este foro que el “procés” entraba en un impasse de difícil salida debido a las dificultades que tendría una salida soberanista para catalunya condicionada por los votos de la CUP.
Ni Junts pel si, ni la CUP han dejado de ser estandartes del independentismo en Catalunya. Donde está la diferencia es en cuestiones ideológicas y en la praxis final de la acción de gobierno.
A alguien le ha extrañado el posicionamiento de loas bases de la CUP?. Cualquier otra decisión hubiera sido traicionar a los principios en los que se fundamenta este movimiento social.
Alguien se imagina a las grandes corporaciones con mando en plaza dando apoyo a un govern donde la base programática esté escrita por la CUP y la semántica la ponga CDC.
Amigos la política actual está directamente relacionada con la situación económica de los ciudadanos de un país. Sin ir más lejos la disyuntiva actual en Catalunya se hubiera solucionado si hace unos años léase si PSOE y PP se hubieran puesto de acuerdo para llegar a un sistema de financiación autonómica más justo con los que pagan. Les aseguro que las cifras de ” a favor” de la independencia se hubieran mantenido entorno a aquel de 28% o quizás en poco más del 30%, pero nunca hubiera llegado a ese 47,8% de las últimas elecciones. Pero quien le decía a las autonomías “menos o más” favorecidas que se había acabado la bicoca de la mal llamada “solidaridad interterritorial”. PP y PSOE seguro que no.
Estamos donde estamos y ahora con la decisión de la CUP que a buen seguro ratificará la asamblea plenipotenciaria nos vemos abocados a unas nuevas elecciones donde la fidelidad de voto a los partidarios del “procés” puede quedar en entredicho…aunque dada la situación seguramente será la única solución viable para recuperar la ilusión que en estos dos meses después del 27S se ha ido perdiendo…
Una realidad que estaba ahí desde que Junts pel si no consiguió ese el diputado número 65 y que los ha dejado a merced de un partido en el que la coherencia de planteamientos es su principal seña de identidad.
Nadie puede llamarse a engaño. La derecha y el centro tienen mal encaje con la izquierda radical.
