CRÓNICAS MARCIANAS 69
LA BARONESA DE CHAMBERÍ
A lo largo de los años (experiencia) de observar de forma profesional o de simple aficionado (jubilado) la política, uno aprende que los aciertos (de los políticos) suelen ser efímeros en el tiempo (el ciudadano olvida rápido) Los errores, en cambio, tienen mayor trascendencia (el rival se encarga de airearlo) Pero lo peor está cuando el error se institucionaliza. Me refiero a la ruptura del acuerdo sobre el Poder Judicial de forma unilateral por Núñez Feijoo. Desde Orwell, los debates en el Senado con Sánchez y esa decisión, las expectativas del líder del centro derecha han ido cayendo (siete puntos según Carles Castro en La Vanguardia) lo que conforma un panorama político muy diferente al que se generó con la caída de Casado y la entronación de Feijoo, incluso (el que había) allá por el mes de julio de este 22. Decíamos lo de la institucionalización de ese “error” (está por ver en cuota electoral) porque analistas con pedigrí ya han patentado este hecho como un antes y un después de su carrera política en la conquista de un centro político que el propio Sánchez había dejado libre ante la amenaza de Yolanda Díaz por la izquierda. Movimiento de ida y vuelta del presidente como se ha demostrado. Ahora, el estrellato en Europa, la audacia de decisiones como los indultos del procés complementados con la reforma del Código Penal (sedición y malversación) que ha conseguido dividir el independentismo del 17 y situarlo en el limbo político. Colocan a Sánchez como paradigma del centro político y especialmente al PSC de Illa como garante de estabilidad en Catalunya, incluso para una burguesía catalana (alineada siempre con el poder y las tendencias) que se aleja por momentos de las extravagancias de Puigdemont (léase señora Borrás) La pregunta que queda en el aire (por falta de información, claro) es si la parte económica del centro derecha (algunos dirían poderes fácticos u oligarquía) están por la labor de mirar para otro lado y dejar para otros tiempos la conquista del poder. Yo no sé responderla, ni tampoco conozco si el señor Feijoo consultó con “botines” y similares la decisión de romper el consenso. Especialistas en las bambalinas de este teatro político (por lo que se escribe o se oye en las tertulias) creen que fue una estrategia equivocada al albur de la presión de “federicos” (léase medios de comunicación afines) y una errática interpretación del “madrileñismo” de sus asesores.
Está por ver (en clave electoral) si esa audacia de Sánchez a la que hemos aludido da el resultado que prevén en la Moncloa. Sedición y malversación como delitos light pueden revertir en una rebelión de las “masas” que se sintieron heridas por aquel octubre del 17…Incluso Lola García en la Vanguardia advierte del peligro que suponen este tipo de pactos con los “indepes” (aunque estén descafeinados)
Por otra parte, Sánchez hace bien en reforzar los acuerdos con la mayoría de la investidura (léase PNV) por aquello de minimizar los efectos del error mayúsculo de la ley del “si es si” que en otras circunstancias hubiera acabado con el cese de Irene Montero. Aquí cabe otra pregunta (en clave electoral) ¿responsabilizará el electorado de centro, izquierda y derecha, a Sánchez de ese desaguisado jurídico? Si nos fijamos en la cuestión principal. Ni Yolanda Díaz (pese al exabrupto de Pablo Iglesias) se ha solidarizado con el error de Irene Montero.
Añádanle la moción de censura de Abascal & Arrimadas (de broma) que como dice Rufián es contra el “Feijoo” de las horas bajas.
Ni los más reputados adivinos podrían decirnos por donde pasa el futuro de la esta derecha post Casado. Hablamos un diez de diciembre del 22. Sin saber las consecuencias de un frío invierno con limitaciones; una economía que mantiene las expectativas, pero con un incierto mañana. De las consecuencias directas de las rebajas de penas a los condenados o por juzgar, del procés…un largo etcétera hasta las municipales y autonómicas del 28 de mayo.
¿Se mantendrá la estrella europea de Sánchez en clave interior? ¿Se pagará la luz “Feijoo”? ¿Cuál será la estrategia del “dinero” en clave política? ¿Cómo afectará las continuas rebajas de penas consecuencia del “si es si” de Irene Montero? Preguntas que solo el tiempo puede dar respuesta.
Mientras, no se olviden, en la libreta del estratega (MAR por más señas) se sigue escribiendo una “obra maestra”: Vida secreta de la baronesa de Chamberí.
