EL ABRAZO DEL OSO
El debate de investidura de mañana no será una confrontación ideológica, como debería ser. No van a discutir sobre modelos de sociedad. Tal como se han desarrollado las mayorías parlamentarias, será un debate político sobre la “unidad de España” dejando de lado la realidad de una sociedad que quiere soluciones a sus problemas inmediatos. El candidato, señor Sánchez hará un discurso programático (estoy convencido) porque es su única escapatoria a los condicionantes reales de su investidura. La derecha (circunscrita actualmente a Ciudadanos y el Partido Popular) tiene la misión de situar a Sánchez en la órbita de los separatistas y en esa tesitura centrará su artillería pesada contra el candidato. Me temo que mañana volveremos a encontrarnos con una sociedad fracturada entre los de “España una” y los de “España diversa” (aunque conlleve el peligro de una ruptura pactada a medio o largo plazo) Para muchos el objetivo prioritario era que España tuviera un gobierno lo antes posible (aquí hasta coinciden los oligarcas) De centro-izquierda más izquierda a la portuguesa. Para unos necesario, para otros tolerable (aunque la subida de impuestos pone en peligro la clase media de este país, que es la que paga el pato) El problema sobreviene cuando la abstención de Esquerra Republicana de Catalunya es imprescindible y marca la negociación introduciendo la variante “Qué pasa con Catalunya”. Ahí es donde se despiertan sentimientos patrios en todos los sectores sociales al grito de “Ya están otra vez los catalanes” como si fueran los causantes de todos los males. Nadie se mira al espejo a la hora de pedir responsabilidades. Si a estos “catalanes” se les une la abstención de Bildu (no hay que dejar de lado que el PSOE gobierna en Navarra gracias a Bildu) el señor Sánchez puede caer en lo del “abrazo del Oso” y despertar todavía más el rechazo de quienes todavía tienen en su memoria “histórica” o no, que Bildu representa la opción política (actualmente pacífica) de quienes en su día utilizaron la violencia hasta el asesinato por la pretensión territorial de la actual Bildu. Serán muy duros estos cuatro años de legislatura (si es que se cumplen) para un Sánchez instalado en contentar a ERC (léase indulto a los políticos condenados por sedición y consulta ciudadana “referéndum” al final de la legislatura) o contentar a los suyos (léase unionistas de la “España una”) que ahora mismo se temen lo peor y dudan si todo esto vale por “una Moncloa para Sánchez”. Por el PNV no hay que preocuparse como buenos democratacristianos pactan con el diablo cuando sea necesario por mantener sus privilegios. Mañana veremos si Casado es el líder natural de la derecha (necesita un golpe de credibilidad personal y nunca se lo pusieron tan fácil) Si Arrimadas (ya sin el apoyo del Ibex-35) retrasa el final de Ciudadanos recuperando parte de los votos útiles que se marcharon al PSOE. A partir del día 7 con gobierno constituido seremos testigos de la ruptura del govern de la Generalitat y la convocatoria de elecciones (el final de Torra está cantado) La fecha de la propuesta de indulto a los políticos condenados por el Tribunal Supremo por el 1-O (seguramente se agotará el tiempo que el Parlamento Europeo mantenga la inmunidad de Junqueras) Eso a corto plazo…para el medio y largo hasta la “consulta ciudadana-referéndum” todavía quedan muchas crónicas marcianas…
